El panorama editorial se ve alterado por una creciente ola de libros producidos por Inteligencia Artificial, una tendencia que ha ido en aumento durante un tiempo considerable y que ha experimentado un impulso significativo con la introducción de ChatGPT. Este avance tecnológico ha democratizado el proceso de escritura, permitiendo a cualquier persona utilizar bots para generar contenido literario. La facilidad de acceso a esta herramienta ha llevado a un aumento en la autopublicación, especialmente en plataformas como Amazon, donde los autores pueden colocar sus libros con relativa facilidad y esperar obtener ganancias.
Amazon ha tomado medidas para controlar esta marea de contenido generado por IA al imponer un límite de tres libros autopublicados por día para cada autor. Este límite, aunque no se ha revelado cuál era el anterior, sugiere la magnitud de la actividad de estos autores que utilizan bots para producir contenido.
La presencia abrumadora de estos libros en las tiendas electrónicas dificulta la búsqueda de obras de calidad entre los autores independientes. Si el mercado se satura con contenido de baja calidad, los lectores tienen dificultades para encontrar obras que valgan la pena. Además, la existencia de libros generados por IA que imitan obras originales plantea desafíos adicionales para los autores genuinos. Se han reportado casos donde libros técnicos escritos por humanos fueron replicados por IA en cuestión de semanas.
La escritora independiente Caitlyn Lynch señaló que, en la categoría de ‘Romance contemporáneo’ en Amazon, solo el 19% de los libros más vendidos fueron escritos por humanos, mientras que el resto fueron creados por bots, lo que refleja la magnitud del problema.
A pesar de la utilidad de herramientas como ChatGPT, existe una preocupación creciente sobre la falta de autenticidad en el proceso creativo. Los lectores prefieren obras genuinas y transparentes, lo que ha llevado al surgimiento de tiendas dedicadas exclusivamente a libros escritos por IA, siempre y cuando se aclare su origen tecnológico.