Los trajes espaciales son esenciales para los astronautas cuando deben salir de la Estación Espacial Internacional (ISS) para realizar tareas como reparar satélites, llevar a cabo experimentos científicos o realizar caminatas espaciales. Estos trajes están diseñados para proteger a los cosmonautas de temperaturas extremas, la falta de oxígeno y la radiación solar. Además, incluyen micrófono y altavoz para mantener la comunicación con el equipo.
A lo largo del tiempo, los trajes espaciales han evolucionado con tecnologías avanzadas. Por ejemplo, SpaceX presentó nuevos trajes en mayo de este año para futuras misiones a Marte, y la NASA ha anunciado nuevos trajes para la misión Artemis III. Sin embargo, también hay otras organizaciones que contribuyen a la innovación en la industria espacial. Entre ellas, Decathlon y la Universidad de Cornell en Estados Unidos están trabajando en nuevos diseños.
Un equipo de investigadores de la Universidad de Cornell ha desarrollado un traje espacial con un sistema innovador para la recogida y filtración de orina. Este sistema convierte la orina en agua potable en solo cinco minutos, un avance crucial para la sostenibilidad en el espacio. Según el artículo publicado en la revista Frontiers in Space Technology, el sistema de filtrado se encuentra en el traje de actividad extravehicular. Cuando los sensores detectan orina, una bomba de vacío la aspira hacia un filtro que la transforma en agua potable, la cual luego se almacena en el depósito de hidratación del astronauta.
Sofia Etlin, una de las autoras del estudio, detalla que el diseño incorpora un catéter externo basado en vacío y una unidad combinada de ósmosis directa e inversa. Este sistema asegura un suministro continuo de agua potable y cuenta con múltiples mecanismos de seguridad para proteger la salud de los astronautas.
El prototipo de este traje ya ha sido probado, y los investigadores informan que el sistema de filtrado tiene una eficacia del casi 80% en el reciclaje de orina. El equipo de la Universidad de Cornell confía en que el traje puede ser probado en condiciones simuladas antes de su implementación en misiones espaciales reales.
Christopher E. Mason, profesor en la Universidad de Cornell y autor principal del estudio, señala que el sistema puede ser evaluado en condiciones de microgravedad simulada, ya que esta es una variable clave en el espacio. Mason agrega que estas pruebas asegurarán la funcionalidad y seguridad del sistema antes de su uso en misiones espaciales reales.