La Audiencia Provincial de Valladolid ha condenado a un vendedor andaluz de vehículos de ocasión a un año de prisión por estafar a dos hermanos vallisoletanos con la venta de un Mercedes ML 280. El coche, adquirido por 7.200 euros en noviembre de 2021, presentaba graves averías cuya reparación se estimó en cerca de 12.000 euros, casi el doble del precio pagado por el vehículo.
La sentencia de la Sección Cuarta de lo Penal impone al acusado, Sergio del R.M., seis meses de cárcel por estafa y otros seis por falsedad en documento privado. Asimismo, anula el contrato de compraventa, obligando al vendedor a devolver el dinero a los compradores, quienes a su vez deberán restituir el vehículo. La resolución también condena al acusado a asumir la mitad de las costas judiciales, incluidas las de la acusación particular.
El tribunal considera probado que el acusado ocultó deliberadamente las averías del Mercedes, que incluían fallos en el cambio automático, la suspensión neumática, el turbocompresor y el cuadro eléctrico, entre otros. Según la sentencia, el vendedor «sabía, o tuvo la oportunidad de conocer», el estado defectuoso del vehículo, pero optó por ponerlo a la venta en internet a un precio superior al coste de las reparaciones, motivado por el propósito de enriquecerse.
El acusado adquirió el coche en una subasta pública el 29 de octubre de 2021 y pocos días después lo vendió a los hermanos vallisoletanos, quienes contactaron con él a través de un portal de anuncios. Asegurados por el vendedor de que el vehículo estaba en «perfecto estado», los compradores realizaron un largo viaje hasta Utrera para recogerlo, pero el regreso a Valladolid se convirtió en una odisea. Problemas mecánicos surgieron casi de inmediato: el coche se quedó sin batería, presentaba fallos en el cambio automático y carecía de seguro e ITV en vigor.
Tras llegar a Valladolid, los compradores trasladaron el coche a un taller oficial de Mercedes, donde las averías fueron valoradas en cerca de 12.000 euros. Desde entonces, el vehículo permanece inmóvil en una nave en La Overuela. El fallo judicial permite a los hermanos recuperar su inversión, mientras que el condenado afronta la posibilidad de un recurso ante el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León.